UNA PEQUEÑA HISTORIA

Empezaré platicando una pequeña historia. Un día cualquiera, estamos mi roomie y yo en la sala de la casa viendo la TV; junto a nosotros, está mi perro, a quien llamaré ‘Firulais’, dejándose querer, acostado en el tapete, con las patas hacia arriba, disfrutando las caricias en su panza. De pronto, mi roomie me dice: – ¿Ya viste esa bolita que tiene Firulais? Está rara. – Apuntando justo donde estaba.

Al día siguiente, lo llevo con el veterinario; después de revisar a Firulais, me dice que lo más conveniente es operarlo, extraer la bolita y mandarla a analizar; una 2da alternativa, sería dar algún tratamiento tópico para ver si evoluciona favorablemente. Dentro de los pros y contras que me señaló, estaba la diferencia en costo de uno y otro tratamiento. -Es que no todos quieren o pueden pagar la operación. – Me comentó el veterinario.

Para mí no había mucho qué pensarle, haría lo que fuera mejor para Firulais, solamente me aseguré de que aceptaran tarjeta de crédito y ya vería yo después cómo pagarla. Lo operaron, le quitaron el tumor, que resultó ser cancerígeno, pero afortunadamente, estaba encapsulado, por lo que no sería necesario hacer ningún otro procedimiento. Firulais estaba sano y fuera de peligro.

Obviamente yo no estaba preparado para ese gasto adicional, pero lo que me importaba era saber que mi perro estaría bien. Realmente nunca consideré en mis finanzas personales alguna emergencia con Firulais, me sentía protegido teniendo un seguro de gastos médicos para mí y un seguro para mi auto, pero la verdad es que ni sabía que existían seguros para perros.

Hoy, que arrancamos con Plan Guau, me hizo recordar aquella pequeña historia y trajo varias peguntas a mi mente: ¿y si yo no hubiera podido pagar?, ¿si por ‘ahorrar’ hubiera elegido el otro tratamiento?, ¿si esa deuda se hubiera quedado en mi tarjeta mucho tiempo?, ¿cuántos habrían tomado el 2do tratamiento por no poder pagar el 1ro?

Nuestro primer objetivo es poner en la oferta digital un seguro para perros que evite tomar una mala decisión por no tener el instrumento financiero correcto, apoyando en el tratamiento del perro, ya sea por accidente o enfermedad; un seguro para perros que me apoye cuando mi perro haga alguna travesura; un seguro para perros que me ayude a prevenir alguna enfermedad; un seguro para perros que cubra una despedida digna a estos miembro de la familia; un seguro para perros que sea fácil de adquirir, práctico y asequible; un seguro de perros a la medida de tus necesidades. ¿Por qué?, porque SON FAMILIA.

Sin comentarios

Publicar un comentario